Hamburguesas de Popeye

Hoy hamburgesas, parecen las de Shrek o de Hulk, verdad?

Pues no, mi fuente de inspiración ha sido el mítico Popeye ;)

Cuando era pequeña no comía casi nada, representaba la pura desesperación para mis padres, no me gustaba nada de nada aparte del helado y cuatro tonterías más.

Me acuerdo que antes del telediario siempre ponían un episodio de Popeye y yo me preguntaba como podía ese hombre tragarse una lata de espinacas así, no entendía cómo podían gustarles, lo que tenía buena pinta eran las hamburhesas de su amigo!!!

Pues, ahora sabes de dónde salen estas hamburgesas.. es un homenaje a este dibujo animado que tanto me gustaba.

La historia, ahora que tengo 30 años, ha cambiado, y mucho: ahora me gusta casi todo pero con las espinacas tengo todavía dificultades y sé que no soy la única.

Así que para ponernos fuertes podemos comer estas hamburgesas que salen muy ricas, también para los que, como yo, no aman especialmente esta verdura!

Además se pueden hacer y luego congelar sin ningún problema, te darás cuenta de que te irán sacando de apuros bastante a menudo! ;)

Ingredientes para 6 hamburguesas:

500 gr de pechuga de pollo

1 kg de espinacas frescas (o 200 gr de las congeladas)

1 huevo

1 cuchara de queso rallado

1 pizca de pimentón dulce

Pan rallado

Sal

1. Si las espinacas son frescas, lavalas y ponlas a hervir durante unos 5 minutos en abundante agua salada. Escurrelas con cuidado intentando quitarles la máxima cantidad de agua.

Forma una bola y dejala enfriarse.

2.En la batidora pon la pechuga de pollo, la bola de espinacas, el huevo, una cuchara de queso curado rallado, una de pan rallado, sal y pimentón.

Dale a la maquina hasta que no se quede todo bien triturado.

3. Empieza a formar las hamburguesas  (si tienes el cacharro aposta mejor...) y pásalas por el pan rallado. 

Salen muy bien a la sartén con de aceite y, sin quieres una versión más ligera, puedes ponerlas en el horno a una temperatura de 180º durante 20-25 minutos, echándoles un chorrito de aceite encima.

Ya está!

¡Qué aproveche!